El Tenerife, de Primera tras siete años

El Tenerife, de Primera tras siete años



JUAN JOSÉ RAMOS, Gerona

(EL DÍA 14/06/2009)

El Tenerife y Tenerife son de Primera División. El regreso a la élite se ha producido siete años después del descenso, en medio del mejor ambiente de fútbol en la historia y con una afición que se lo merece todo. Y lo ha conseguido también la mejor versión futbolística de un equipo en la categoría de plata. La estadística canta. Desde los 81 puntos, pasando por la mejor segunda vuelta desde que la Segunda es de 22 equipos (47 puntos, sólo una derrota y 13 goles en contra), el posible pichichi Nino... Números de récord.

El proyecto de Miguel Concepción sacó al cuadro insular de la quiebra y el casi descenso a Segunda B para conseguir, en tres años, este éxito. Con decisiones tan acertadas como la continuidad de José Luis Oltra cuando muchos pedían su cabeza. Y él ha devuelto la confianza, aprovechando los mimbres que Alfonso Serrano y Santiago Llorente le entregaron, para armar un equipazo. El resto del protagonismo, para los jugadores. Muchos de Primera, aunque hayan jugado circunstancialmente en Segunda.

El partido

Salió mandón el conjunto canario. Con su cara de siempre. Quizá con más nervios, con alguna imprecisión propia de lo que había en juego, pero con la misma intensidad y la idea futbolística que le ha llevado a cosechar este éxito tan anhelado por todos sus seguidores. Alfaro y Nino, quiénes si no, fueron los primeros en probar a Rafa Ponzo (2' y 4'). Pero fue Juanlu el que le puso de verdad en apuros con un disparo junto al poste izquierdo, que el meta despejó a córner como pudo (9').

Quiso sacar la cabeza el equipo local, pero le costaba combinar, con lo que debió recurrir a dos balones colgados. El primero acabó con un remate de cabeza de Hiroshi que detuvo Sergio Aragoneses sin problemas (10'). En el segundo, un balón envenenado lo sacó a córner cerca del larguero (15').

Espejismos.

Porque el balón, la sensación de control y las ocasiones volvieron a ser blanquiazules a continuación. Nino, en dos ocasiones, volvió a rondar el gol para los suyos. Recibió de Richi y le pegó de volea fuera (17') y, poco después, hizo emplearse a fondo a Ponzo tras un precioso tuya-mía con Alfaro (20').

El gol tardó en llegar

Precisamente el mediapunta cedido por el Sevilla Atlético fue el siguiente en apuntarse al carrusel de oportunidades con un cabezazo al larguero (35'), tras un centro de Pablo Sicilia desde la izquierda. Parecía que el gol no llegaba, que no había manera. Pero apareció el mago. Kome, magistral durante toda la tarde, se inventó el gol del ascenso. Partiendo desde su posición en la izquierda, recibió cerca del área, se adentró recortando a José y sacó un disparo seco (40'). Rafa Ponzo no pudo hacer nada esta vez. Iba fuerte, muy fuerte. Lo empujaba toda la Isla, todo el Archipiélago y muchos "birrias" desde distintas partes del mundo.

Estalló la grada donde se ubicaba el millar de tinerfeñistas en Montilivi, los más de 20.000 que esperaban en la Plaza de España de Santa Cruz... La fiesta ya era imparable. Hasta el descanso poco más sucedió. Y luego tampoco. El Girona, convidado de piedra en la fiesta, lo intentó. Un resbalón de Luna permitió a Arnal plantarse mano a mano ante Sergio, pero ahí se agigantó la figura del guardameta gallego (54').

Kome tomó el mando para darle un balón de gol a Nino, pero Ponzo evitó la sentencia (57'). Luego lo intentó en solitario el camerunés, arrancando los aplausos de Montilivi (58'). Los minutos fueron pasando, los cambios también y el final se fue acercando, mientras la gente se bañaba ya en el charco de la Plaza de España. El resto lo escribieron ustedes.